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lunes, 14 de febrero de 2011
El matrimonio es una vocación
Li Misol
Santo Domingo
Si pensaba que un matrimonio por la iglesia es sólo bellas flores en el altar de un templo iluminado, se equivocó: el sacramento matrimonial es más que eso, y para dar testimonio de su gran significado nada mejor que las enseñanzas de una pareja que ha tenido la dicha de cumplir casi medio siglo de vida conyugal, unida por este vínculo sagrado.
Carlos y Maruchi Elmúdesi, del Movimiento Familiar Cristiano (MFC), una organización de la Iglesia católica que prepara a novios para el matrimonio, dicen que la unión matrimonial es mucho más que una boda religiosa: es la relación de dos personas aceptándose mutuamente.
“Yo me entrego a tí y prometo serte fiel; ahí está la clave del matrimonio”, dice Maruchi Elmúdesi, con la convicción que le dan los 47 años de casada.
El Movimiento Familiar Cristiano es parte de la Pastoral Familiar de la Iglesia católica y funciona en el país desde 1964 con el visto bueno de la Conferencia del Episcopado Dominicano. Su tarea primordial es ofrecer talleres de preparación para el sacramento del matrimonio, comúnmente llamados cursos prematrimoniales.
El programa está aprobado además por la Conferencia del Episcopado Latinoamericano (CELA), y se basa en un libro titulado “Casarse en el Señor”, en el que se encuentran pautas para las charlas que se dictan en cada encuentro, y los temas que se van a desarrollar.
“El matrimonio es una vocación, pero también es importante saber cómo se construye una pareja: con comunicación, con convivencia”, dice Elmúdesi.
La pareja explica que su misión es recibir de diferentes parroquias a personas con fechas próximas para sus bodas, para prepararlas en torno a varios aspectos relacionados con la vida conyugal, pero sobre todo para que se conozcan bien antes de dar el gran paso.
“¿Cómo hemos llegado hasta aquí? No es fácil: cediendo, compartiendo, los dos somos diferentes pero nos complementamos, y eso no pasa con todo el mundo”, afirma Elmúdesi.
La idea de los cursillos prematrimoniales casi se resume en una sola frase: “¿Estás seguro (a) que esa es la persona con la quieres pasar el resto de tu vida?”.
La respuesta debe ser honesta y los cursos del MFC, como dice Maruchi Elmúdesi, tratan de ayudar a las parejas a que piensen detenidamente en esta decisión, “sin asustarlos, solamente advirtiéndoles de la realidad que es el matrimonio”.