NUEVA YORK._ El inmigrante dominicano Camilo Espinal de 61 años de edad, fue víctima de un brutal ataque a manos de cuatro pandilleros, cuando se dirigía a su casa en Newark. Espinal, recibió un golpe que casi lo deja sin un ojo y dijo que no se trató de un atraco. La policía investiga si la agresión contra el inmigrante criollo está relacionada a un crimen de odio o racial, delito frecuente contra hispanos en New Jersey. Espinal declaró a un canal local de televisión que sus atacantes son cuatro jóvenes, aparentemente miembros de una pandilla.
“El está sangrando, déjalo, no hay que matarlo”, relata Espinal que decía uno de sus atacantes a sus cómplices, otro de los cuales tenía intención de que lo asesinaran allí mismo. El dominicano dijo que fue emboscado en un camino poco antes de llegar a su residencia.
“Después de eso, perdí el conocimiento y me dejaron tirado y sangrando en el suelo”, agregó. Recordó que sufre de pérdida de memoria y otras complicaciones. Dijo no creer que sus atacantes fueran asaltantes o ladrones, porque de lo contrario, quizás lo hubieran matado.
“Creo que es cosa de gangas, porque en ningún momento intentaron robarme nada”, manifestó Espinal diciendo que ya no se siente seguro en las calles de Newark en cuya ciudad renunciaron 167 policías la semana pasada por un desacuerdo entre su sindicato y el alcalde Cory Booker.
Dionisio Espinal, hermano de Camilo criticó los recortes en el presupuesto y dijo que las pandillas se han fortalecido luego de la crisis de la alcaldía con la policía, lo que está poniendo en peligro la seguridad de millares de residentes.