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martes, 31 de agosto de 2010
Policía dominicano denuncia lo obligan a detener inocentes
NUEVA YORK._ Adil Polanco, un oficial del Departamento de Policía de Nueva York (NYPD) y nativo de la República Dominicana, denunció que sus superiores lo obligan junto a otros compañeros a detener civiles en las calles de la ciudad para inflar las estadísticas contra el crimen. Las declaraciones de Polanco, que trabaja en el cuartel 41 de El Bronx, aparecen en la edición de ayer lunes del semanario The Village Voice que se edita en la ciudad. El oficial dijo que supervisores, comandantes y representantes del sindicato de policías (PBA, inglés), lo han obligado a detener civiles que no han cometido ningún delito.
Otros de sus colegas, también pasan por la misma situación y uno de ellos - Christopher Fred – fue despedido de sus funciones por negarse a aceptar las exigencias de sus comandantes. Adrian Schoocraft, oriundo de Texas y del cuartel 81 en Brooklyn, es otro de los oficiales que padecen la presión de sus superiores.
El policía dominicano que es investigado por Asuntos Internos dentro de un grupo de números agentes que asumen la misma práctica, señaló al Village Voice que las estadísticas se distorsionan en muchos destacamentos de la ciudad en el sistema conocido como “ComStat” (Estadísticas Computarizadas).
“Los supervisores, constantemente han estado exigiendo a los oficiales para que detengamos, registremos y hagamos cargos a personas inocentes y ya estamos cansados de las demandas y críticas por esa práctica”, agregó el policía criollo.
Polanco, que se dedicó por algún tiempo a hacer grabaciones para documentar lo que veía como delito en su distrito, dijo que muchas de las mismas cosas que ocurren en otros cuarteles, se practican en el 41, dentro de su jurisdicción.
También alega que los jefes policiales obligan a bajar de categoría los delitos y se niegan a tomar denuncias de los civiles para manipular y maquillar las estadísticas. “Ha ocurrido todo el tiempo. La razón era CompuStat y los superiores de más alto rango, conocen la situación, lo saben”, sostuvo el agente dominicano.
Denunció que se les impone una cuota obligatoria da arrestos, citaciones a las cortes, detenciones y registrar a los civiles, aunque estos no sean sospechosos de ningún crimen.
El cuartel 41 en el que trabaja Polanco está situado en el sector de Hunts Point en El Bronx, un distrito mayoritariamente habitado por boricuas, dominicanos, centroamericanos y mexicanos y negros. Polanco dijo que tiene una grabación de un supervisor del sindicato, en la que el segundo conmina a oficiales a seguir la misma rutina.
En el caso del cuartel 181, se recibieron allí 117 llamadas, un número sin precedentes, de las que fueron atendidas un porcentaje muy bajo. El comandante de esa dotación, Steven Mauriello, fue transferido a otra delegación y es otro de los superiores que está en investigación de Asuntos Internos.
El traslado de ese comandante se llevó a cabo por presiones de líderes políticos y activistas comunitarios. Docenas de cartas fueron enviadas al comisionado Raymond Kelly reclamando transferir a Mauriello. El oficial Schoolcraft escribió en una misiva a los superiores que “no sólo los funcionarios tratan a nuestra comunidad como si fuera objeto de una ocupación militar, también ignoran las denuncias penales hechas por los residentes”.
La conducta de los oficiales se basa en el programa “Pare y Registre”, contra la que asambleístas y senadores estatales están buscando legislar para eliminarla.