El comunicador Rubén de Lara Fernández ruega a Leonel Fernández que eviten que lo maten

- LA VEGA.- El comunicador Rubén de Lara Fernández Secretario General del Colegio de Periodista seccional de este municipio, llamó al Presidente de la República doctor Leonel Fernández Reyna para que intervenga en la preservación de su vida, puestos que personas allegadas al gobierno de turno, quieren asesinarle.

La solicitud la hace el destacado periodista de manera pública a través de su espacio “La Vega y los Deportes”, que se difunde de lunes a sábado en el horario de 1:00 a 2:00 de la tarde por radio La Vega, uno de los medios de comunicaciones de mayor incidencia en las poblaciones del Cibao Central, y gran parte de las zonas del Nordeste y Noroeste del norte del país.

De Lara explica al Mandatario Fernández, que grupos allegados a su gobiernos y a los cuales sólo identificaría al ejecutivo, se han reunido en el parque central de esta ciudad, así como en el barrio Las Flores, tramando su asesinato, por la postura que siempre ha mantenido de defender los mejores intereses de la República Dominicana.

El comunicador, es el único que se ha mantenido denunciando las atrocidades ecológicas que comete la minera Falcombridge, y otro tanto lleva a cabo en estos momentos con la también extractora y procesadora de metales Barrick Gold.

Rubén de Lara Fernández, no es un ciudadano ni profesional cualquiera, es un verdadero trabajador por vocación de servicios en beneficio de la sociedad en sentido general, lo que ha demostrado desde que abrazó los medios de comunicaciones, siendo solicitado para que anime y conduzca cuántos eventos de las más variadas índoles, tienen lugar en su natal La Vega, pero que hace lo mismo cuando lo reclaman de otras ciudades.

Pocas personas en la ciudad de La Vega sin medir el ámbito en que realicen sus actividades, son más conocidas que este hombre, que ha sido reconocido por reyes y humildes, como ser distinguido y de inconmensurables cualidades de gente de bien, por lo que el presidente Fernández, y los propios medios de comunicaciones, tienen que preservarle la vida y poner en movimiento los organismos investigativos del Estado, para localizar a quienes traman contra su existencia.