Un joven de 16 años se encuentra en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital de Jaén tras haber sufrido una inyección de aire comprimido por el ano el pasado viernes. A la víctima, que se encuentra estable aunque su estado es muy grave, se le ha tenido que extirpar el bazo y los intestinos y tiene afectados otros órganos como el hígado. El servicio de urgencias ha comenzado hoy a suministrarle diálisis.
Previsiblemente, el menor se encontraba con unos amigos en el taller del padre de uno de ellos cuando, por causas que no han trascendido y que investiga la Policía Judicial de la Guardia Civil, uno de ellos le introdujo aire comprimido por el ano con un compresor similar al utilizado para inflar la rueda de los camiones.
La Guardia Civil, que ha abierto una investigación, trabaja con la hipótesis de que hay un responsable de los hechos y otros dos testigos. Sin embargo, aún no se ha practicado ninguna detención.
Sus padres han admitido hoy que no encuentran una explicación que justifique semejante broma. "Dicen que fue jugando, pero vaya juego, eso es más que una broma", ha comentado el padre, que ya ha anunciado que emprenderá acciones judiciales, aunque las familias de los menores que protagonizaron los hechos mantienen buenas relaciones e incluso han visitado a los padres de la víctima en el hospital.
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