Proteger nuestras imágenes, datos y demás documentos en la popular red social es más fácil de lo que parece. Sólo habrá que tener en cuenta una premisa: todo lo que se publica en internet es público
La polémica en la que se vio envuelto Facebook la última semana provocó el miedo de no saber si nuestros datos se encuentran seguros dentro de la red social. Sin embargo, conseguir privacidad dentro de la misma puede ser mucho más fácil.
Para comenzar basta con leer con atención los términos de uso y entonces sí decidir qué tipo de perfil escogeremos. En Facebook existen dos: público y privado. El público permitirá que todo usuario de la red social pueda ver nuestros datos y el privado hará que estén disponibles para nuestros “amigos”.
Por otro lado, como aconseja el diario Clarín, es preferible no revelar en ningún casos datos personales como números de tarjeta de crédito, DNI, teléfono o cuentas bancarias, entre otra información similar.
Si bien es fácil estar un poco más seguros en Facebook hay que tener siempre en claro una premisa: en internet toda la información es pública. Lo único que podemos hacer es controlar, aunque no del todo, quiénes serán los destinatarios. Por eso hay que pensar dos veces antes de publicar cualquier cosa en la red.
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