Pedro Martínez regresó al final de la temporada pasada, pero al margen de sus números, estuvo muy alejado del lanzador imbatiable que todo el mundo vio con los Medias Rojas.
No hay seguridad de que esté totalmente recuperado.
Su recta ya no pone a lucir ridículo a los bateadores y depende más de la localización.
La llegada de Johan Santana lo puede ayudar. Tendrá menos presión, pero de paso pierde parte de su jerarquía.
Lo que hizo en el pasado es grande, grandioso, lo que pueda dar ahora, está en veremos
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.