Las autoridades evacuaron esta mañana más de mil 200 presos del penal de La Victoria como consecuencia de las inundaciones que se registran desde ayer en ese recinto carcelario, por la tormenta Noel.
Los reclusos fueron trasladados a las cárceles de Najayo y Monte Plata, en autobuses de la Oficina Metropolitana de Servicios de Autobuses OMSA y el Ejército Nacional.
Los reos eran recibidos en la cárcel de Najayo por el procurador general de la República, doctor Radhamés Jiménez quien había disputo la evacuación para evitar consecuencias mayores ante las inundaciones de las celdas.
Jiménez Peña dijo que 60 mujeres que estaban en igual situación en la cárcel de Rafey, de Santiago fueron trasladadas a la cárcel del Palacio de Justicia de esa ciudad.
Los presos trasladados guardaban prisión en las celdas ubicadas en los pabellones de la parte baja, trasera y laterales de ese recinto penitenciario.
Para penetrar al recinto, las autoridades se trasladaron en botes, debido que la comunidad está incomunicada por la crecida de un arroyo.
Algunos reclusos se resistían a ser trasladados y dos de ellos fueron sacados heridos tras ser golpeados por sus compañeros.
Abordo de los autobuses, autoridades de la Dirección General de Prisiones elaboraron una lista con su nombre y la infracción cometida
Las celdas de la parte baja, trasera y laterales están complemente inundadas al igual que la entrada principal que está obstaculizada.
El director general de Prisiones, general José Ignacio Sandoval Cabrera, dijo que todo está bajo control y que la seguridad del penal era custodiada a través de un amplio operativo policial para evitar que algunos reos se escapen.
El fiscal de la provincia Santo Domingo, doctor Perfecto Acosta, también se presentó al recinto carcelario.
En las proximidades de la celda Alaska fue necesario penetrar una ambulancia, que logró llevar a casi a mitad de agua y sacar a varios reclusos por la ventana. En el penal de La Victoria hay alrededor de 4 mil reclusos.
El agua empezó a penetrar ayer en hora de la tarde afectando la maquinaria de la Escuela Vocacional que funciona dentro de la cárcel, donde los reos reciben docencia en diferentes áreas técnicas.
Es la segunda ocasión que ese recinto carcelario se inunda. La primera ocurrió en 1998 tras el paso del huracán George’s. En esa ocasión se produjo una fuga masiva de reos. Cuatro reclusos y un policía murieron ahogados.
El raso Juan Mejía Aquino, de 21 años, se ahogó cuando intentó impedir la fuga de varios reclusos.
La cárcel quedó bajo agua y los presos también se resistieron a ser evacuados y fueron alojados en la azotea del recinto penitenciario
Ante la fuga masiva de los reclusos en septiembre de 1998, la Dirección General de Prisiones tuvo que realizar un censo para determinar el número de reclusos que quedó en la cárcel.
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