Quisqueya continua de luto.

SAN JOSÉ DE OCOA.- Miles de ocoeños recibieron ayer tarde los restos del padre Luis José Quinn, llegados de Miami, Florida, donde falleciera el día dos semanas después de que fuera sometido a una cirugía de corazón. Una masa humana esperó los despojos del sacerdote Scarboro que durante 42 años acompañó a los ocoeños en su misión pastoral y en la promoción humana y del desarrollo de sus comunidades más apartadas.

Dos kilómetros antes de llegar a la ciudad, miles de personas esperaron el cortejo, desde donde la multitud lo siguió a pie, luego recorrieron gran parte de la ciudad y de ahí se instaló el velatorio en la Iglesia Nuestra Señora de la Altagracia, donde será sepultado el viernes al mediodía.

Participantes en la procesión informaron que la multitud formaba una masa humana de un kilómetro de largo, que recogía a su vez el llanto de personas que en sus casos expresaban su dolor por la muerte del padre Luis.